Sencillamente, la técnica es diferente.
Los tiempos quirúrgicos se mantienen, de forma que el cierre de las dos hendiduras del labio se llevan a cabo en un solo tiempo quirúrgico, entre los 3 y los 6 meses de vida.
La nariz es, probablemente, el mayor reto del cirujano en este tiempo, ya que nos encontramos ante una punta achatada y una columela corta que se trabaja en el mismo acto quirúrgico. A pesar de ello, no es infrecuente la necesidad de una rinoplastia secundaria.
La técnica de cierre del paladar no difiere en los casos uni o bilaterales y se lleva a cabo entre los 12 y 18 meses de edad.
Preoperatorio |
Postoperatorio